Revuelto + (Pasta x Rica Salsa) = Cena Legendaria




PRESENTACIÓN

Un gran bol de Pasta, dos platos hondos para servir la Pasta, dos platos con el Revuelto, dos tenedores, una cuchara, una taza con la Salsa Special, dos vasos al Stylo Andrés (con hielo hasta arriba) y Nestea de Melocotón.

PROCEDIMIENTO

Pasta: no es necesario explicar como se hace la pasta.
Salsa: vertimos tres yougures de Fresa en una taza; echamos Miel y Canela; removemos con cariño y ya está.
Revuelto: freímos el Bacon con poco aceite hasta que empiecen a parecer gusanos (hasta que no estén del todo churruscaditos); luego ponemos los huevos (cinco en este caso); removemos un ratito el huevo con el Bacon hasta que el Revuelto parezca lo que es; lo siguiente es echar el Chorizo troceado previamente; y por último, cuando ya esté prácticamente acabado, incluso con el fuego apagado pero con el sartén caliente, le añadimos unas lonchas de queso, removemos un poco más y servimos.

PD-Consejo: no lo probamos, pero en nuestra opinión la Salsa Special quedaría mejor con la Pasta fría...

SUSHI








OS VOY A EXPLICAR UNA FORMA DE HACER SUSHI NIGIRI Y MAKI FACIL Y ECONOMICA.
La gente al oir sushi piensa en pescado crudo y eso no es del todo cierto, también existe el sushi de verdura y de pescados marinados, o ahumados.
El arroz es un arroz especial chino con más almidon que el resto, pero si cocinas de una determinada forma el arroz hacendado, te sale de la misma manera... cocer el arroz como si fueras hacer un arroz pilaw es decir, que el agua cubra el arroz un dedo por encima. mientras se va cociendo el arroz, haces la mezcla de vinagre, azucar y alga nori en la proporcion de un litro, 500gr y 2 hojas... eso tiene k macerar un buen rato, si el vinagre queda fuerte, puedes aligerarlo con un poco de agua.
Y aquí el secreto del sabor del sushi, cuando enfries el el arroz tienes que hacerlo rapido y mojandolo con la mezcla... dejandolo un poco pegajoso y compacto.
Luego ya es solo enrrollar con una esterilla, poner el alga, el arroz y puedes hacerlo de lo que desees: aguacate, boca de mar, langostino, salmón ahumado, atún crudo, cualquier pescado" si lo hacéis con pescado crudo, congelarlo antes por anisakis" y al enrrollar dejarlo bien prieto.. como vereis en la foto se puede hacer tambien con el arroz por fuera del alga tambien.. y si le poneis anacardos o pistachos picados da un toque muy muy bueno!!
Un consejo es mojarse las manos en el vinagre cuando vayáis a enrrollar el sushi, porque tenéis que mojar un poco el alga para que pegue y no poner arroz hasta el final, sino al enrrollar sale todo!!
Es muy bueno para cenas romanticas, afrodisiaco y también está muy bueno y se tarda poco cuando tienes practica unos 20m desde que cueces el arroz..
Se puede acompañar cn salsa de soja o teriyaki.. todo esto se encuentran en nuestros amigos los chinos!! y no comprar el vinagre de arroz que puede salir casi por 7 euros mas y no se dan ni cuenta!

Precio de esta comida por persona: 4 euros. Dificultad: media.
La próxima vez será algo mas fácil de cocinar y también de abrir la nevera y haber que sale!

PD.
Os cuelgo algo de decoración que hago en el hotel y el dragón ese no, no lo hice yo solo!! jajaja que conste que es un nabo!

ALBÓNDIGAS RELLENAS

PRESENTACIÓN

Otra forma más de hacer la carne picada con sorpresa.

PROCEDIMIENTO

En un bol grande pones bien extendida la carne picada y la aliñas al gusto: ajo y cebolla muy muy picaditos, sal, pimienta, perejil… Añade un poco de leche, queso parmesano seco en polvo, algo de pan rallado y un huevo batido. Mezcla todo bien con un tenedor, sin prisa. Separa la carne en tantas partes como comensales y amasa las bolas. Coge cada una y con un dedo haces un agujero, que rellenas con queso emmenthal rallado y un poco de orégano. Con cuidado rehaz la bola tapando el agujero y las vas reservando. Pica bien unos frutos secos (almendras o avellanas o cacahuetes…) o unos quicos (granos de maíz tostados), y reboza las bolas de carne que se cubran bien. Mételas en la freidora poco a poco, pues si metes muchas se romperán. Con el aceite a media potencia y un poco más de tiempo se harán bien por dentro, pero si lo prefieres, puedes poner el aceite más fuerte y tenerlas solo un momento y quedará más cruda la carne por dentro.
En este caso se acompañaron con una menestra de verduras aliñada con aceite de oliva y vinagre, pero claro, también le van perfectas las patatas fritas en cualquier versión. Se pueden comer así muy bien, aunque admite cualquier salsa de las más habituales. Especialmente recomendable sería una buena mostaza, aunque una salsa de queso azul, de pimienta o de champiñones irían perfectas. Aunque si los niños le ponen kétchup o mayonesa, que no te extrañe nada.

CREMA DE VERDURAS ALIÑADA.

PRESENTACIÓN

Calabaza rodeada de buenos amigos de la huerta, convertidos todos en un suave puré, con tropezones de pan frito y textura de huevo duro, sazonado con una vinagreta aromatizada.

PROCEDIMIENTO

Como siempre, depende de las verduras y hortalizas disponibles, que todas valen para un puré, pero este día usamos media calabaza, dos puerros, un par de buenas patatas y tres zanahorias generosas, todo troceado groseramente. Bueno y un par de trozos de coliflor cocida, que quedaban en la nevera.
Empezamos rehogando todo unos minutos con una base de cebolla pochada, con sal, perejil y hierbabuena. Luego lo mojamos hasta cubrirlo con un caldo de verduras, que era el agua en la que habíamos hervido la coliflor el día anterior, reforzado por una pastilla de caldo de verduras. Toda la huerta metida en el caldero...
Lo tuvimos un buen rato hirviendo a fuego lento hasta que todo estaba muy muy pasado (cuidado no se quede sin agua y se queme, añade la necesaria, pero que quede denso).
En el mismo caldero metimos la batidora a toda velocidad y lo dejamos suave, suave. Es el momento de dar el toque final: un poco de crema de leche (nata líquida para cocinar) o queso para untar (o las dos cosas), corregir de sal, y a servir cuencos.
Mientras se cocía todo, metimos un par de huevos que retiramos antes de meter la batidora. Los pelamos, los picamos con un tenedor y los pusimos de guarnición para darle textura y color a la crema.
Y mientras todo estaba haciéndose lentamente, partimos media barra de pan duro del día anterior en cuadraditos, y los freímos un momento en aceite muy caliente. Los dejamos escurrir en papel de cocina hasta que en el último momento van también a la mesa para añadirlos cada uno a su plato.
Y el último paso, que hicimos cuando estaba a punto de acabar la cocción, es la vinagreta, en la que picamos muy finos un par de dientes de ajo, los mezclamos en el almirez con perejil fresco y un poco (poco) de hierbabuena, le añadimos aceite de oliva picual virgen extra y unos toques de vinagre de Jerez, lo emulsionamos bien agitándolo con un tenedor y lo dejamos a punto, para aromatizar cada uno la crema a su gusto.

CALAMAR RELLENO DE CALAMAR Y SOJA

PRESENTACIÓN

Calamares enteros rellenos calamar picado y brotes de soja, guisados en una salsa de su propia tinta y acompañados de patata asada.

PROCEDIMIENTO

La verdad es que está hecho con un poco de trampa, porque usamos unas latas de calamar en su tinta para hacer la salsa y el relleno. Pero queda muy bien.
Limpia los calamares, reservando los cuerpos enteros. Las cabezas y los tentáculos se usan para el relleno y las bolsitas de tinta para la salsa.

RELLENO
Picas media cebolla grande en juliana fina (en tiras) y la vas pochando a fuego lento con un poco de sal. Le añades un manojo generoso de brotes de soja y mientras se va haciendo, picas bien las cabezas y los tentáculos que incorporas a la sartén y lo remueves de vez en cuando para que se haga todo por igual y no se queme. Mientras, abres las latas de calamar en su tinta (en esta ocasión, para cuatro personas usamos un pack de esos de tres latas pequeñas) y con cuidado vas sacando la mayor parte del calamar picado y dejando la salsa en la lata. Los trozos que sacas los vas añadiendo la sartén y sigues removiéndolo a cada poco. Cuando esté, lo apartas del fuego y lo vuelcas en un plato para que se enfríe un poco, así será más fácil manipular para rellenar cada calamar. Si quieres aumentar el relleno, le va muy bien el huevo duro picado. No hay que llenarlos del todo, porque encojen mucho al guisarlos.
Rellena cada calamar, valiéndote de una cucharilla con la mano derecha y del pulgar de la mano izquierda, en la que tienes cogido el calamar. Resérvalos hasta terminar la salsa.

SALSA
Picas la otra media cebolla muy picada y la pochas a fuego lento con un poco de sal y bien de aceite. Calienta una taza de agua en el micro y disuelve una pastilla de caldo de pescado. Pon una cucharada pequeña de harina en la sartén y la tuestas un momento junto con la cebolla. Incorpora el caldo caliente y remueve continuamente para disolverlo bien todo. Añadir un poco de leche caliente, que quede cremosa la mezcla, y cuando esté fina, incorpora las bolsitas de tinta, rómpelas bien y remueve sin parar. Vuelca la salsa de las latas y mezcla bien todo. Corrige de sal y deja al fuego muy muy lento.
Usa una fuente refractaria (que pueda ir al horno) pequeña para volcar la salsa y meter los calamares rellenos, que queden cubiertos. Lo puedes llevar unos minutos al horno medio o incluso dejar en el mismo fuego lento, en ambos casos, no tarda casi nada en guisarse el calamar.

POTA GUISADA CON VERDURAS

PRESENTACIÓN
Un par de buenos filetes de pota troceados en medio de un salteado de verduras.

PROCEDIMIENTO
Corta la pota en trozos generosos pero que no requieran cuchillo (o sea, que puedan llevarse a la boca enteros, teniendo en cuenta que al guisarse se encogerán).
En la paella pocha una cebolla picada, con sal. Corta en lochas finas un par de zanahorias y un puerro y ponlos al fuego con la cebolla. Parte dos buenas patatas en cuadrados pequeños e incorpóralas al guiso, removiendo de vez en cuando. Cuando las patatas empiecen a hacerse un poco incorpora la pota, pon un poco de sal, espolvorea con alguna hierba aromática (romero y estragón son idóneas) y tápalo, que se termine de hacer a fuego lento, removiendo esporádicamente. Cuando esté hecho, vuelca una latita pequeña de guisantes (que el día de la foto no pusimos, pero que le dan un toque perfecto), remueve sólo un poco con cuidado y a servir.

Spaghetti con salsa de langostinos

PRESENTACIÓN
Pedazo de salsa espectacular que convierte cualquier pasta en delicatessen....

PROCEDIMIENTO
Es un poco pesado y tiene algún detalle complicadillo, pero el resultado merece la pena.
Usaremos langostinos crudos, aunque pueden ser congelados, que habrá que descongelar un poco, claro, bien con unos segundos en el microondas, bien dejándolos un buen rato antes a temperatura ambiente..

Primero separa unos cuantos, como un par de ellos por comensal. Con ellos haremos un fumet (caldo), para la salsa: ponlos a hervir en un poco de agua, con algo de sal, un toque de hierbabuena y un buen diente de ajo.

Vamos a empezar por "limpiar" un poco los demás langostinos quitándoles las "antenas" con unas tijeras. Es pesado y podrías no hacerlo, pero yo lo hago para tener menos restos luego al pasar la salsa. Una vez preparados los vamos a pasar bien en una sartén grande con un poco de aceite de oliva, añadiéndoles una pizca sal. Los reservamos y en esa misma sartén vas a pochar una cebolla muy muy picada, al fuego lento y con un poco de sal.

A los langostinos que has hecho en la sartén les tienes que quitar y reservar las cabezas, con cuidado de no aplastarlas (que no se pierda su líquido, que es la vida de la salsa) y limpiarles las colas, que las reservas también hasta el final. Una vez tienes todas las cabezas, las metes en un vaso largo de batir, incorporas los dientes de ajo que has hervido en el caldo y con la batidora pasas todo lo más fino que puedas. Llevará un rato, incluso puedes necesitar ponerle un poco del caldo o simplemente agua. Al acabar viene lo más complicado y pesado: colar todo eso. Necesitas un colador metálico más bien grande y según añades un poco de lo batido lo remueves bien con un cazo o una cuchara, para que pase el líquido y se vaya quedando sólo el resto de los caparazones que vas tirando según le quitas el líquido. Y no olvides ir poniendo la pasta a hervir en agua salada.

Cuela el caldo de los langostinos que tenías hirviendo (que los reservas para decorar el plato en el último momento). En la sartén que tienes la cebolla ya bien pasada añades un cucharadita de harina y las tuestas un momento. En seguida le añades el caldo de los langostinos, removiendo bien la mezcla con un batidor de mano para que no se hagan grumos. En cuanto esté bien ligado y suave, incorpora lo que has sacado de batir las cabezas y sigue removiendo. Es el momento de darle un pequeño toque con un vino blanco o un jerez seco y corregir de sal. Cuando todo esté en su punto incorpora las colas de langostino un momento y ya está para servir. En el plato, ya sobre la pasta, puedes espolvorear un poco de queso rayado (poco) y una hierba al gusto.

Crema de carne con patatas

PRESENTACIÓN
Esta es otra manera de cocinar la carne picada. Otra más.
Es una idea para disfrutarla sola o como salsa para pasta. Aunque aquí se presenta con dados de patatas fritas, que le dan un toque perfecto y lo convierten en un plato poderoso.

PROCEDIMIENTO
Hay varios pasos que dar a la vez. Tienes que hacer un caldo de pollo, pelar, partir y freír las patatas, y hacer la salsa. Así que hay que organizarse.

CALDO. Lo primero será poner un caparazón de pollo a hervir en un poco de agua, con una pizca de sal, una gota de un buen aceite de oliva y quizá alguna hierba aromática a tu gusto. Sería perfecto si le pones una hojas de puerro (puede ser la parte verde que siempre se tira, pero que para caldo es perfecto) y un poco de apio.
Y a esperar un buen rato, poniéndolo a fuego lento cuando haya roto a hervir (en caso de necesidad... siempre puedes sustituir todo esto por un poco de agua que pones a hervir con una pastilla de caldo de pollo y otra de verduras).

PATATAS. Tendrás que pelar tres o cuatro patatas medianas, partirlas en dados y salarlas ligeramente. Hay que freírlas bien hasta que estén doradas. Lo idóneo es hacerlo en una freidora.

SALSA. Para la salsa vamos a hacer una especie de vlouté (como besamel, pero sin leche): picas bien una cebolla pequeña y la pones al fuego lento en una sartén grande con una pizca de sal. Le puedes añadir un par de ajos cortados en láminas muy finas.

Para este momento tienes que tener el caldo preparado: lo cuelas en otro recipiente y lo reservas sin que se enfríe (lo puedes dejar en el fuego muy muy lento). Los restos del pollo hervido sí déjalos enfriar.

Cuando la cebolla esté bien pasada (transparente) añades una cucharada de harina y la tuestas un momento. Inmediatamente incorporas poco a poco el caldo y remueves cuidadosamente un buen rato para disolver bien la harina.
Llegados aquí tienes la opción de pasarle la batidora, haciendo que desaparezcan la cebolla y el ajo y que adquiera un textura untuosa. O bien, dejarlo así, más suelta la salsa y con los trozos suaves de ajo y cebolla visibles. Ambas valen. Prueba una cosa un día y otra diferente otro día y tu verás lo que prefieres. También es el momento de darle un toque con especias: pimienta fresca, nuez moscada, un toque de curry, algo de orégano... A tu gusto.

Las patatas se supone que las habrás ido haciendo en un par de viajes a la freidora (o más si es muy pequeña) y las vas reservando en una fuente cualquiera con un papel de cocina debajo para quitarles el exceso de aceite. Del pollo hervido del caldo puedes tratar de sacar la carne que lleve, migándola con los dedos.

Y ya está todo a punto. Incorpora la carne picada en la salsa y vete removiendo para que se suelte bien. Es el momento de añadirle el pollo migado y una lata de champiñones si tienes, pero no pasa nada si no. Un par de minutos y la salsa habrá mezclado el rojo de la carne y sólo queda incorporar los dados de patatas fritas, remover un momento y a la fuente. Espolvorea queso rallado y un poco de perejil (o de orégano, o la hierba que te guste) y a la mesa. (Las patatas podrían quedar muy bien si las sirves por separado recién fritas y crujientes, pero si eso no es posible, si las has tenido que tener a la espera un rato y ya se han quedado blandas, mejor mezclarlas en la sartén antes de servir).

TIMBAL CARNAVALERO


ARG
Es tiempo de carnaval y nada mejor que unir gastronomia con carnaval.
Cocinaremos con la base de una coliflor y tambien aprovecharemos estas entrañables fiestas para disfrazarnos de forma homónima (completamente desnudos y con una flor en el - - - -).
El plato que se propone es elegante y estructurado, donde destacan las notas que producen la mezcla de diferentes verduras.

PROCEDIMIENTO
Se cuece muy bien la coliflor y se bate con aceite y nata, hasta producir un suave y delicado puré. Este puré será un fantástico colchón sobre el cual descansarán adecuadamente, alcachofas, espárragos y tomates.
Esta mezcla nos va a dejar en la boca un intenso sabor, cuajando una sensación cálida (no me refiero a que haya que quemarse) y a la vez agradable, que dejará un largo recuerdo en el paladar gracias a un breve saludo dado por la pizca de pimienta que habremos añadido.

Beef sticks

PRESENTACIÓN
Sí, "sticks". No confundir con "beef steak" (de donde viene el horrible término español "bistec"), que se refiere a "filete" (steak) de carne de vaca.

Esto es un invento diferente y divertido, jugando con las palabras y con la carne de vaca. Se refiere a un palo, vara, rama, bastón... (stick) de carne de vaca. Cilindro de carne de vaca picada, por ejemplo.

Es resumen, como una hamburguesa o una albóndiga, pero con otra forma. Si lo haces muy gordo, quedará muy jugoso por dentro (un poco crudo), si lo haces más fino puede ser más crujiente y seco (más hecho).

Una gran idea, la verdad.
En plan casero, fiestero, se puede comer con la mano como las patatas fritas o los "finger" o "nuggets" de pollo... (y "mojarlo" en una salsa, o varias). Y puedes hacerlo en la freidora, en la plancha o incluso en la barbacoa!
O sea, fácil, rico, divertido, apto para niños o comidas informales... Muy recomendable, vamos.
Brillante... si me lo permiten ;)

PROCEDIMIENTO
Carne de vaca picada que se aliña al gusto. Yo suelo añadirle un poco de perejil, cebolla y ajo muy muy picados, sal y pimienta. Y lo que no puede faltar es queso rallado, que puede ser estilo parmesano u otros más cremosos.
Es habitual también añadir un huevo (yo no suelo hacerlo) o pan rallado (para hacerlo crecer un poco). Y para rizar el rizo ya, se puede dar el toque final con un poco de nata líquida, pero poco, que quede seco, porque si no se desmoronarán los "palitos" de carne.
Una vez hecho eso, se amasan los "sticks" con las manos del tamaño deseado. Y luego conviene o bien enharinarlos un poco, o bien empanarlos. Y a la freidora.

Pescadilla en salsa de coles

PRESENTACIÓN
La pescadilla es un pescado muy suave y de carne blanca generosa pero no muy sabrosa. Por lo que la intensa col de Bruselas es un buen complemento. La salsa de coles es muy poderosa, para el que le guste ese poderío. Si hay niños o gentes de paladar estrecho, mejor rebajarla un poco.

PROCEDIMIENTO
En una sartén grande y con buen fondo, fríes un minuto por cada lado las rodajas de pescadilla y las reservas en un plato, con cuidado de no romperlas.

En el mismo aceite sofríes una cebolla y un par de dientes de ajo, todo muy picado y con poco de sal. Cuando esté la cebolla trasparente, salteas un momento las coles de bruselas (que ya vienen cocidas en su envase de cristal), le añades nata y un poco del líquido en el que vienen conservadas. Ojo, que es muy sabroso, vete probando, que no amargue demasiado.

Cuando esté muy caliente ya, metes la batidora y lo conviertes en crema. Pruébalo y rectifica el sabor con sal y con líquido de la conserva. Si te queda muy líquido, puedes espolvorear un poco (poco! que espesa mucho al enfriar) de puré de patatas en copos. Le da una gran textura, sabor y aclara el color. Yo lo uso mucho y queda muy bien.

Cuando tengas el punto de la salsa, incorporas las rodajas de pescado con cuidado (incluyendo el líquido que hayan podido rezumar en el plato) y dejas que hierva todo a fuego lento hasta que se termine de hacer el pescado (que son unos minutos, solo). Agita un poco la sartén en el proceso, para que se ligue la salsa con la esencia del pescado, pero cuidado con removerlo con un cubierto, que puedes romper el pescado.

Calamares con patatas en fumet de pescado

PRESENTACIÓN
Aroma de mar arropado por la patatas rotas. Es un guiso sencillo y que gusta mucho a todos. Fácil de hacer, barato y sano.

PROCEDIMIENTO
Empieza haciendo el caldo de pescado con las raspas, cola y cabeza de la pescadilla. Simplemente lo pones a hervir, con una pizca de anís en grano, perejil y un toque de pimienta. Podrías añadir una cebolla pequeña partida en ocho trozos o unas hojas verdes de puerro (sí, del extremo verde que no se come del puerro). Lo tienes un buen rato hirviendo a fuego lento y lo vas desespumando de vez en cuando (con una espumadera sacas la espuma que se crea en la superficie). Y lo filtras bien antes incorporarlo al guiso en su momento. Puedes sacar la carne del pescado que se haya quedado en la cola y la cabeza, asegurándote de que no quedan espinas, y la desmenuzas bien para incorporarla al final al guiso. Le da una textura increíble.

Mientras el caldo se va haciendo, en un caldero pones cebolla a pochar con un poco de ajo, no muy picado, y añades algo de sal. Puedes añadir un poco de zanahoria en lochas finas o taquitos pequeños.

Cuando está un poco pochado todo añades las patatas "rotas": es decir cortadas en las manos en formas irregulares y girando el cuchillo para que se "rompa" literalmente la patata. Eso hará que se deshagan mejor sus bordes finos y desprenda su fécula, dando a todo el guiso algo de textura y espesor, que queda muy bien (mucho mejor, sin duda, que un simple caldo). Tienes que estar atento a remover todo, porque las patatas se pegarán al fondo (sobre todo si hay poco aceite, que sería lo mejor).

Cuando las patatas estén empezando a hacerse, incorporas los calamares (o pota) cortado en tiras cortas o cuadrados (para poder comerlo con cuchara) con un poquito de perejil. Remueves bien y tapas (el calamar irá dejando algo de líquido). Lo dejas unos minutos fuego lento removiendo a cada poco. Añades una cucharadita de pimentón y un poco de laurel, lo remueves un momento y por fin incorporas el fumet de pescado filtrado caliente. Lo tapas y lo dejas a fuego lento hasta que las patatas estén bien pasadas.

A mí me gusta que no quede muy caldoso, por lo que si es necesario, cuando esté acabando, abro el caldero para que reduzca un poco y quede en la textura deseada. Prueba, rectifica de sal y sirve caliente en plato hondo.

Champiñones rellenos al horno

PRESENTACIÓN
El aroma y el sabor de la tierra que jugosamente entregan los champiñones, se adornan aquí con ese toque italiano que siempre da el queso parmesano tostado con orégano.

PROCEDIMIENTO
Lo primero es limpiar bien los champiñones con agua corriente, y recortar la parte de la "raíz". Luego hay que separar el tallo o pie, lo cual no es difícil, pero hay que hacerlo con cuidado de que no se rompan: con una mano (izquierda normalmente) se sujeta el sombrero y con la otra vas moviendo el pie o tallo en muy suaves movimientos circulares hasta que finalmente se separa limpiamente. Los tallos se reservan para otro día.

Para el relleno en este caso se utilizó carne picada buey, pero se pueden utilizar otras cosas, como taquitos pequeños de jamón serrano, beicon o jamón york picado...

Se rellena bien cada pieza (con cuidado de no romper la seta) hasta que rebose, se hace un pequeño hueco en el medio con la punta del dedo (que se usará para el queso rallado) y se lleva a empanar. Para ello, en un bol pequeño se pone pan rallado con una pizca de sal y perejil, incluso con sal de ajo (venden pan rallado ya aliñado que no está nada mal). Metes cada pieza rellena en el bol para empanarlo por abajo y por los lados, rellenas el centro con abundante queso parmesano rallado y espolvoreas un poco de orégano y pan rallado. De ahí a la fuente de horno ligeramente engrasada.

Serán 10 ó 12 minutos de horno a fuego medio y a la mesa. Se puede servir con una mayonesa o alioli, o con alguna salsa caliente, de queso, de carne, de verdura...

Lomo de atún fresco con patatas y pimiento asado

PRESENTACIÓN
Exquisitez absoluta. El atún con lo pimientos asados es el matrimonio perfecto. Y las patatas hacen de inmejorable lecho de amor. Sencillo y delicioso.

PROCEDIMIENTO
Los pimientos han sido asados previamente en el horno, completamente enteros y envueltos en papel de aluminio. A media temperatura durante unos 15 o 20 minutos. Cuando se enfríen un poco se abren, se pelan y se les quitan las pipas, cuidando de no perder el jugo que producirán.

En un caldero se pasan los lomos de atún un momento por el fuego con una pizca de sal y se reservan. En ese mismo aceite (necesariamente oliva virgen extra intenso, en este plato no puede haber excepciones) se pocha una cebolla con un poco de sal, cortada en tiras largas (haces aros y los abres por un lado) y un par de dientes de ajo en lascas finas y grandes.

Cuando esté todo medio hecho se incorporan un par de patatas grandes cortadas en lonchas finas (como las usadas para hacer chips) con un toque de sal y perejil, y se tapa. Lo remueves bien al principio para que las patatas se empapen de aceite y no se peguen (ni entre sí ni al caldero). Luego, según se vaya guisando hay agitarlo (o removerlo) con mucho cuidado para que no se deshaga la patata. Cuando esté casi terminada la patata, se incorpora el atún y los pimientos en tiras, se le da un toque de pimienta y chorreón de Jerez. Lo tapas y lo tienes unos minutos dándole par de vueltas al atún, con cuidado de no romperlo cuando se vaya haciendo y controlando que no se pase, porque se seca mucho.

Papillote de merluza

PRESENTACIÓN
Delicia del mar, suave, jugosa, aromática, sana, fácil de hacer, adecuada para cualquier edad, buena presentación...

El papillote permite que merluza salga muy jugosa y las verduras bien hechas, todo en su propio jugo, resultando un plato sano y delicioso.

PROCEDIMIENTO
Prepara y reserva: una cebolla en juliana (tiras finas y largas), haz unas lonchas finas y largas de zanahoria, filetea finamente unos dientes de ajo, pica un poco de perejil fresco. Puedes incluso añadir otra hierba aromática (tomillo, estragón, hierbabuena...)y pica unos tallos de champiñones.

Prepara una lámina de papel de aluminio en la que quepa bien el filete de merluza. Pon sobre ella una gota de aceite de oliva virgen extra, intenso, un pequeño manojo de tiras de cebolla y zanahoria, unas lascas del ajo, un poco de champiñón picado, una pizca de sal y coloca el filete de merluza encima. Espolvorea por encima la hierba aromática escogida, una pizca de pimienta fresca y de sal y otra gota de aceite. Y así con cada filete de pescado.

Tapa todo con otra hoja de papel de aluminio, enrolla los bordes que se cierre bien el contenido y colocan en la bandeja del horno. Unos 10 ó 15 minutos con fuego medio. Al sacarlo, se sirve en el mismo papillote de aluminio, que se habrá inflado un poco y al que se le hacen un par de cortes con unas tijeras.

Como acompañamiento, son idóneas las patatas asas al horno, envueltas también en papel de aluminio, al las que se les añade un poco de mantequilla o aceite de oliva y toque de pimentón al abrirlas.

Puedes acompañar mejor con una mayonesa, alioli, salsa tártara o salsa bearnesa, que servirían tanto para las patatas como para la merluza. Hay a quien le gusta poner limón (incluso dentro del papillote al asar el pescado), pero yo no soy muy partidario.

Mejillones al vapor del romero

A.R.G.
"FILIBRANQUIOS DEL ATLÁNTICO AL VAPOR" otro festín que nos presenta nuestro Cheff DI TORRES. Exquisitos bocados de carne blanda, jugosa y anaranjada con un increible sabor a mar. El Cheff potencia su sabor de forma espectacular al añadir en la cocción, aromas que produce la mezcla de hierbas y vino. Ademas del maravilloso sabor que producen en la boca, estos moluscos bivalvos filtradores, son muy ricos en sales minerales como hierro y sodio, lo cual hace más delicioso aun este plato.

PROCEDIMIENTO
Pues muy muy simple, la verdad.
Se colocan los mejillones en el caldero con un chorreón de vino blanco y se espolvorean generosamente con romero picado. Se tapan y a fuego medio unos minuntos hasta que se abran bien todos los mejillones. Y punto.

Albóndigas de añojo en coulis de champiñones y puerros sobre tortita

A.R.G.
Delicioso plato del cheff DI TORRES en Can LA CUEVA con el nombre de albóndigas al aroma del campo con suave esencia provenzal sobre un colchón de panqueque. Delicioooooooooso...

PROCEDIMIENTO
La carne picada aquí es de añojo, osea algo más viejo que la ternera (entre año y año y medio), más roja y sabrosa pero aún muy tierna. Se aliña al gusto (sal, pimienta, perejil, pan y queso rallados muy finos, huevo, crema de leche...), se amasan las albóndigas (cuanto más grande sean más jugosas quedan) y se pasan muy ligeramente por harina.

Hecho eso, se pasan un momento por la sartén con aceite bien caliente, lo justo para sellarlas, pero dejándolas crudas aun, y se reservan. Para montar la salsa, pochamos bien las verduras muy picadas en ese mismo aceite a fuego lento, con algo de sal (en este caso se usó un poco de cebolla, unos dientes de ajo, un puerro y tallos de champión). Cuando esté medio hecho se le pone un chorreón de vino tinto o incluso coñac, se saltea un momento y se añade un poco de nata líquida.

Es el momento de probarlo para controlar la sal y se puede añadir un toque de hierbas aromáticas (pimienta y tomillo le pueden ir muy bien, pero vale lo que sea, o nada...). Por fin se incorporan las albóndigas, se tapa y de deja unos minutos, removiendo esporádicamente con cuidado de no romper las albóndigas. No requiere mucho tiempo, yo prefiero que no quede muy hecha la carne, y si te pasas de deshará todo, así que...

Mientras todo esto se va haciendo, vas cuajando las tortitas y colocándolas una en cada plato, para llevarlo a la mesa ya servido por platos individuales.

Empanadas: Salada, de atún y sardinas. Dulce, de mermeladas

A.R.G.
Nuestro cheff DI TORRES esta noche quiere hacer un homenaje a los pastores y nos propone de cena un condumio inventado por ellos que ha llegado a ser una excelencia en la gastronomía mundial. Dos viandas con toscas masas, una que viaja con un recado salado procedente de los mares y la otra con un recado dulce buscando el envío al paladar de un aroma afrutado.

PROCEDIMIENTO

Paella de spaghetti guisados en lecho de berenjena

A.R.G.
Nuestro gran Cheff DI TORRES nos traslada en esta ocasión a la vieja Sicilia. Sí, sí, ya sabemos que es el epicentro de la Mafia pero... algo irresistible nos dirige hacia este lugar (no entendemos porque).
Degustaremos y disfrutaremos de una receta que se llama "Spaghetti di Melanzane alla Siciliana".
La textura de la pasta es semiblanda armonizándose perfectamente con los frutos extraidos de las tierras de Catania. Es una receta muy sabrosa, aromática y cálida (si ponemos pimienta), donde la berenjena proporciona un sabor muy especial que seduce al paladar.
Para triunfar plenamente deberemos regarlo con un vino de Marsala, producto de esas tierras insulares.

PROCEDIMIENTO
Pues es difícil conseguir el punto de la pasta. Éste no es un plato sencillo. La idea es guisar los spaghetti más o menos como se cocina el arroz, y no resulta sencillo. Si sale bien es delicioso, pero...

Utilizaremos un caldo de verduras y, después de algún fracaso, me he inventado un plan: mientras hago el sofrito en la paella, pongo los spaghetti al fuego en el caldo de verduras a que se vayan ablandando. A veces funciona.

En la paella, con un buen aceite de oliva virgen extra de sabor intenso, sofries una buena cebolla bien picada, un par de zanahorias en lonchas finas y una berenjena cortada en tacos, todo con un poco de sal. Cuando esté ya medio pochado todo, incorporas los spaghetti y un poco del caldo de verduras y lo dejas al fuego lento unos minutos más, hasta que la pasta esté al dente. Vas añadiendo más caldo hasta que la pasta esté hecha. A mi me gusta que quede un poco caldoso. En cuanto esté, espolvoreas un poco de orégano y acompañas con queso parmesano rallado grueso.

Merluza al horno en pan y mantequilla con papa asada y salsa rosa

A.R.G.
Bocado sibarítico de filetes de pez teleósteo, rebozados en mantequilla y pan al horno. Destaca en este plato, que nos ofrece nuestro Cheff DI TORRES para cenar, la finura de los filetes simetricos donde la exquisitez de su carne melosa, florece como gran protagonista, en el paladar. Siendo acompañados perfectamente como guarnicion con una patata asada, y se lubrica el filete con una deliciosa y aromatizada salsa rosa, también conocida como salsa "boo k paasssa".

PROCEDIMIENTO
Esta es una manera realmente fácil de hacer el pescado, que queda sorprendentemente bien y en un momento.
Usamos filetes de merluza (incluso de esos que venden congelados, no son lo mismo, pero no quedan mal), mantequilla y pan rallado (que puede estar sazonado con sal, ajo y perejil).
Primero derrites la mantequilla (que no se dore), luego en ella mojas bien los filetes de merluza y los pasas por el pan rallado. Tal cual los colocas en la rejilla del horno a fuego medio y en unos 10 minutos está. A mí me gusta hacerlo con el grill encendido, para que quede el pan tostado por arriba, pero eso va en gustos.
Para los más forofos, un poco de queso hilado espolvoreado por encima le da un buen toque. Y al queso horneado le va de maravilla un poco de orégano.
Se puede servir con alguna salsa fría como mayonesa, all-i-oli, tártara, rosa... que además iría perfecta con las patatas asadas al horno como se hizo en este caso.

Patata asada y berenjena rebozada con mayonesa de atún.

A.R.G.
Ya sabéis que dicen "en martes ni te cases ni te embarques", pues nuestro distinguido y a la vez apreciado cheff DI TORRES, desafiando una vez más todo lo previsible, se embarca y nos presenta un plato que ha bautizado como "deliciosa verbena de solanáceas con mahonesa" una de ellas al horno, para resaltar el sabor de su baya carnosa y amarillenta, y la otra, rebozada y frita, para potenciar el sabor de su pulpa blanca. Todo convenientemente regado con una sorprendente mahonesa de atun.

PROCEDIMIENTO
Dos buenos acompañamientos para cualquier plato de carne o pescado. En este caso se presentaron con una mayonesa a la que se había añadido una simple lata de atún bien migado, que le dio un toque sabroso original. Genial!

Las patatas están simplemente lavadas y cortadas en "rebanadas" gruesas, que se han metido al horno sobre la rejilla, con queso rallado, una pizca de sal y pimienta, y con una gota de aceite en cada pieza.

La berenjena, sin embargo, no se metió al horno, aunque podría haberse hecho de la misma forma y hubiera quedado muy bien. En este caso, preferimos hacerla rebozada y frita.
Bates un huevo, lo sazonas bien (sal, ajo en polvo, perejil...), le añades un poco de harina (que quede cremoso, pero no espeso). Corta la berenjena pelada en rodajas gruesas y las vas pasando por el huevo justo en el momento en que las vas a meter en la freidora, y hasta que se dore el rebozado.

Arroz al horno con pollo y pimientos

A.R.G.
Nuestro Cheff DI TORRES nos traslada esta noche a los maravillosos arrozales de La Albufera y nos presenta su creación: Sinfonía de aromas compuesta por arroz, patatas, cebollas,
zanahorias y pollo. Orquestándose todo en el horno y aplaudida al desprender el sabor profundo del pimiento rojo, conformando una enorme textura solemne".

PROCEDIMIENTO

Cubos de carne roja en salsa de quesos

A.R.G.
Hoy nuestro cheff DI TORRES quiere ofecer un pequeño homenaje al cubo de Rubik y para ello nos presenta este maravilloso plato. Cubos de bife rodantes, con sabores del Benelux al ritmo tirolés, mezclado con un maravilloso toque trentino al roquefort.

PROCEDIMIENTO
Aliñas la carne picada al gusto (un poco de ajo y cebolla muy muy picados, perejil, sal y pimienta, pan y queso rallados, un poco nata líquida, huevo...) y la amasas con las manos, haciendo bolas (albóndigas), y luego, hábilmente, vas cuadrando cada bola a base de pequeños golpes sobre la tabla, dándoles forma de cubo. Cada cubo lo vas a enharinar ligeramente y a pasar por una sartén con un a gota de aceite bien caliente, cuidando de que las seis caras del cubo pasen unos segundos por el fuego. Vas reservando en un plato a parte los cubos ya sellados.
Para montar la salsa de queso, picas una cebolla muy fina, y la pasas bien a fuego lento con una pizca de sal (bien pochada pero sin que se queme!). Si te gusta espesa la salsa, puedes añadir media cucharada de harina cuando la cebolla esté terminada, y la rehogas un poco antes de añadirle nata líquida (o leche o mitad y mitad), y remueves bien un rato, hasta que hierva unos minutos. También queda bien y la espesa un poco si añades algo de queso blanco untable (estilo Philadelfia). A esa crema le incorporas un buen trozo de queso de cabra (como medio rollito de los que venden de queso extremeño) y una cuña de queso azul (aquí hemos usado el exquisito queso italiano gorgonzola), que encuentras en cualquier supermercado. Los troceas un poco para que se deshagan mejor y sigues removiendo a fuego lento hasta que el queso esté sin grumos (aunque alguno pequeño tampoco queda nada mal...). Un toque de pimienta fresca le irá muy bien, incluso nuez moscada, al que le guste, y pruébalo a ver el toque de sal, porque los quesos ya aportan bastante.

Una vez la salsa a punto, hay que incorporar la carne. Para ello, si es posible, a mi me gusta utilizar una fuente que puedas poner al fuego y luego llevarla directamente a la mesa. Para eso hemos hecho cubos: al ponerlos con cuidado en la salsa, se deben quedar medio cubiertos de salsa pero con la parte superior descubierta, y no los movemos, queremos que se hagan, pero dejando parte de la carne poco hecha y muy jugosa. Verás cómo están cuando los partas en el plato...

En este caso acompañamos todo con unas coles de Bruselas (de las que viene ya cocidas, que simplemente salteamos unos minutos para darles un poco de calor) y unas patatas muy muy fritas, partidas en tiras muy finas y largas (encantan así).

Arroz bomba con carne asada

A.R.G.
Para la cena nuestro gran Cheff DI TORRES nos sorprende una vez más.
Para llegar al plato seleccionado, tenemos previamente que navegar por una sopa "Tómatela Tun", cuidado con confundirla con sopa "Wang Tun".
De esta forma llegamos al plato escogido: delicia oriental completándose con un ligero pero a la vez intenso sabor de res.

PROCEDIMIENTO.

Asado de vacuno

A.R.G.
Presentamos hoy una explosión de sabores. Os presento laminas de vacuno enriquecidas con sabores de la campiña y aromatizado con un caldo dignificando con plenitud su propia esencia.

PROCEDIMIENTO.
Pues éste es uno de los platos más sencillos de hacer y que mejor pueden quedar y más pueden impresionar a cualquiera. En éste caso se utilizó una pieza de cadera de vaca, pero venden unos lomos de cerdo muy baratos que quedan de escándalo.
El plan es asarlo con unas verduras. En una fuente de horno bien aceitada pones una buena cebolla cortada en gajos para que luego quede en tiras. Una zanahoria y un par de patatas cortadas en lonchas finas. Y eso ya vale, pero... puedes añadir un pimiento pequeño en juliana fina (tiras) y un poco de puerro en aros finos. Y para hacerlo ya de lujo, unas setas en trozos pequeños (champiñones valen) y un berenjena pequeña pelada y en tacos pequeños. A todo eso le das un toque de sal según lo vas picando todo.
Encima de ese lecho maravilloso pones el trozo de carne salpimentado y enaceitado (oliva virgen extra de sabor intenso) y medio vaso de tinto o de coñac. Y ya. Al horno medio una hora más o menos...
La carne se corta en lonchas no muy finas y se sirve con todas las verduras bien revueltas.

Montaña de tortitas

A.T.M.
Sip!! Esto son un montón de tortitas una encima de otra con un relleno entre medias.

Hicimos varias "montañas" con diferentes rellenos. Todas tenían un tipo de queso y una mermelada. Quesos para fundir tipo emmental, o quesos para untar, tipo Philadelfia.

Y la combinación ganadora fue: Philadelfia al salmón con mermelada de naranja amarga. Espectacular. Sabrosísimos los dos componentes pero que encajaron sorprendentemente bien. Muy muy recomendable.

PROCEDIMIENTO.
Vas rellenando la "montaña" según van saliendo las tortitas. Aprovechamos para ir fundiendo el queso cuando aun está el pancake en la sartén/placa al darle la vuelta. Luego al sacarlo se coloca encima del anterior y se le añade la mermelada.

Puedes hacer la masa sin levadura y te quedan más bien creppes en vez de tortitas. pero no desmerece nada el final.

Prueba

Esto es una prueba de cómo sería una entrada.

La idea es contar aquí lo que cocinamos. Una foto del plato sería recomendable y divertido.

Vale todo, pero nada profesional. Cosas caseras, pero de verdad. Hechas en casa tranquilito. Recetas improvisadas pero que quedaron bien (aunque sea por casualidad).

Disfrutar con la comida desde que imaginas el plato (incluso desde cuando estás comprando ingredientes), mientras lo cocinas, cuando te lo comes y luego contándolo, para darnos ideas, disfrutarlo juntos y reírnos entre todos.

Ya sabes, cocina y cuenta.